Las Leyes y la Justicia.

En las páginas de la edición dominical de LPG, me encontré con este artículo de un médico especializado en neurocirugía. Usualmente, en la columna semanal se tocan temas relacionados al área de especialización del profesional. En esta ocasión, se aparta de la senda habitual para compartir su opinión sobre algunos aspectos del ejercicio del Derecho en El Salvador.

Normalmente, estos son los temas abordados hábilmente por Ixquic*; sin embargo me atrevo a colocar esta nota que refleja lo que piensan y sienten muchos de mis compatriotas.

Pregúntale a tu neurocirujano
Del espíritu de las leyes

Dr. José Zanoni Yada Neurocirujano-neurointervencionista
Fecha de actualización: 1/13/2008

Disculpen a un médico ignorante en leyes hablar sobre ellas, pero hay situaciones jurídicas que escapan a mi lógica de salvadoreño.

Leyendo un poco encontré esta frase, la cual da nombre a un libro del Francés Montesquieu, frase, la cual creo algunos jueces desconocen: "Del espíritu de las leyes".

Esta me hizo tener algunas reflexiones: Como médico, durante los años de la guerra, atendimos en nuestros hospitales nacionales tanto a pacientes de la guerrilla como a soldados de la Fuerza Armada.

Era nuestra obligación, sin importar la tendencia política que tuviéramos, sin importar que ese paciente al salir tomara nuevamente un fusil para matar, porque nuestro juramento nos prohibía pensar, no jugábamos a ser Dios, simplemente queríamos salvar una vida.

Por eso, me pongo en el lugar de los jueces, a los cuales leyes y reglamentos los obligan a soltar a un criminal simplemente porque pasó 12 horas sin ver a su defensor o por tecnicismos jurídicos.

Los entiendo, los comprendo, pero me pregunto: "¿Dónde está el espíritu de las leyes, dónde está el alma de esa legislación?, que se vuelve contra los inocentes, pues al dejar en libertad a un criminal, sabiendo que lo es, nos volvemos el instrumento que permitirá a esta persona volver a causar daño, volver a violar, a matar"

Me pregunto: "¿No habrá alguna ‘interpretación de la ley’ que nos permita evitar estas aberraciones que se dan en nombre de la justicia?"

Nuevamente, pido perdón por mi ignorancia, pero les pido a ustedes que conocen de Derecho, busquen la alternativa jurídica, legal para cumplir con el espíritu de las leyes, leyes que están hechas para liberar al inocente y castigar al culpable, y más allá leyes que están destinadas a dirigir y gobernar un pueblo.

Hemos visto cómo todas estas en manos de demagogos inescrupulosos solo sirven para dar un marco legal a lo ilegal, para justificar la liberación de un culpable o perpetuar la presencia de un supuesto líder ya sea de derecha o de izquierda, ambas han utilizado el nombre de las leyes para quebrantarlas.

Finalmente, he comprendido que no importa la cantidad de códigos que haya si no existe una conciencia social que nos obligue a cumplir con ese espíritu de la ley, que solo persigue el bien común.

En nuestra profesión como médicos muchas veces hemos quebrantado una normativa para salvar una vida.

En el Hospital Bloom se han atendido niños mayores de 12 años cuando ha sido necesario; en los hospitales nacionales se ven pacientes del Seguro Social y viceversa cuando la vida de un ser humano está en juego.

Pero, cuidado, no estamos diciendo que debemos quebrantar las leyes, simplemente estamos confirmando, como médico, que la razón fundamental de nuestra profesión es salvar vidas y ningún tecnicismo podrá evitarlo.

Pienso, igualmente, que la razón fundamental del juez no es aplicar las leyes, sino brindar justicia.

Y por tercera ocasión, perdón por el atrevimiento de hablar de un tema cuyas reflexiones nacen de mi frustración como salvadoreño y mis deseos de algún día ver nuestro hermoso país con justicia y en paz.

Ya hubo alguien que dijo, hace aproximadamente dos milenios, que el Sábado fue hecho para el Hombre y no el Hombre para el Sábado. Eso es lo que nos recuerda el Dr Yada. Lo repito, por si no quedó lo suficientemente claro:

"La razón fundamental del juez no es aplicar las leyes, sino brindar justicia."

Categoría: Reflexiones, Política, Justicia