2.3.09

Desfiles innecesarios

Me encuentro con esta noticia en RFI,

Zimbabue
Si hay miseria, que no se note
Artículo publicado el 28/02/2009 Ultima reactualización 28/02/2009 14:54 TU

Pese a desastrosa situación económica y política que atraviesa el país, los partidarios del presidente Robert Mugabe organizan una fiesta de 250.000 dólares para festejar el cumpleaños 85 del dictador africano.


El 94% de los zimbabuenses no tiene trabajo y decenas de miles de personas están enfermas de cólera a raíz de una epidemia que ya se cobró 3.800 vidas. La inflación galopante del país ce cifra en miles por ciento, mientras que 13 millones de personas dependen para comer del Programa Alimentario Mundial.

Sin embargo, el cumpleaños número 85 del dictador africano merece algunos sacrificios. Sus simpatizantes hicieron una pequeña colecta para la ocasión y reunieron 250.000 dólares para organizar un banquete. Según el diario de Estado The Herald, para la fiesta -celebrada en Chinhoyi, pueblo natal del Mugabe-, serán sacrificados 80 vacas, 70 cabras y 12 cerdos. El todo será coronado por un enorme pastel de cumpleaños.

Los partidarios del dictador llegaron al pueblo con una banderola que rezaba: "El presidente es mi héroe. Hizo mucho por mi país y quiero verlo feliz".

El nuevo primer ministro, el líder opositor Morgan Tsvangirai, que formó un gobierno de unión con Mugabe, su rival histórico, a mediados de febrero, debe participar en esa celebración pública, a la que también asistirán miles de personas.

No puedo dejar de asociarla a la celebración del pasado sábado 28 en el Estadio Mágico González en honor a los soldados salvadoreños veteranos de la guerra en Iraq. Si bien a algunos les puede parecer que era algo importante y hasta necesario e indispensable, para mí fue algo completamente irrelevante. Lo que no entiendo es porqué se les ocurrió hacerlo en día sábado. Comprendo (pero no acepto) los desfiles militares del 15 de septiembre (Día de la Independencia) pues se hacen en día festivo en donde hay poco tráfico en las calles. En este caso, se les ocurrió hacer esto en día laboral, cerrando una de las principales avenidas de San Salvador, provocando un gran caos vehicular, con el consabido estrés, desperdicio de combustible, perdida de tiempo y accidentes viales.

Por supuesto, no soy ingeuo, sé que este desfile está enmarcado en la actual campaña política y puede se leído (si uno es tremendamente mal pensado) como una demostración de las fuerzas armadas, recordándonos que son fuertes, que siguen "estando ahí" agazapadas, listas para defender la democracia al precio que cueste (incluyendo un pequeño golpe de estado)

Todo esto se me ocurrió, entre otras tantas cosas, mientras estaba embotellado, a mediodía del sábado por culpa del acto para los veteranos de la guerra de Iraq.

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