17.11.11

Siete ciclos.

A muchas personas, y en ese grupo me incluyo, nos gustan los ciclos. Darnos cuenta que el sol volvió a aparecer nuevamente a través de esa rendija en particular. O que la lluvia comienza a reducirse y comienzan los vientos helados del norte. Nos gustan los cumpleaños y nos ponemos tristes cuando se cumple otro mes o año desde que nuestras personas queridas partieron de este plano de la existencia.


Nos gusta celebrar esos mojones que nos despabilan de la ajetreada vida cotidiana. Sin ellos, sentimos que el tiempo huye y nos decimos "si acaba de comenzar el año y ya estamos a mediados de noviembre" Buscamos que este o aquel día sea especial, porque sino sería uno más del montón. Además, buscamos apoyarnos en estos días marcados por todos para iniciar o terminar nuestras empresas: "hoy que es inicio de año comienzo a hacer ejercicio" "El lunes de la otra semana comienzo la dieta" o "después de mi cumpleaños voy al médico" ¿Por qué no simplemente comenzamos hoy mismo la dieta o mañana en la mañana nos levantamos más temprano a hacer ejercicio? Quizá nos falta voluntad o creemos que al ser un día especial, tendremos mejor suerte al emprender el viaje. No obstante, la apertura o cierre de estos ciclos nos sirve para reflexionar, modificar ligeramente el rumbo, o pocas veces para felicitarnos por el buen trabajo realizado.


Siete ha sido el número perfecto a lo largo de nuestra civilización occidental. Es la suma de tres y cuatro, del triángulo y del cuadrado. Número de suerte para unos, de notas musicales para otros, de cuarta parte del ciclo lunar para otras.

Durante los siete años que tiene de vida esta bitácora, han sucedido muchas cosas. ESte último año ha sido de los duros: la muerte de RMO me ha marcado mucho. Perdí un amigo, un referente y un lector crítico de estas palabras. Han pasado muchas cosas de las que apenas comienzo a escribir, pero que todavía nos estoy listo para compartir.

No puedo prometerme a mí mismo escribir más y menos puedo jurar que publicaré todo eso en este espacio virtual. Lo único que sí reconozco es que soy más persona cuando escribo y me pesa menos el cuerpo y mi corazón cuando lo hago.

Un saludo a los que han estado acá desde el principio, tanto para los que llegan tarde a la película. A estos últimos les digo que tienen la (des)ventaja que todo está escrito y solo tienen que tener la paciencia y los hígados para leerlo.

5.11.11

Bicentenario

Hoy celebramos en El Salvador el Bicentenario del Primer Grito de Independencia ocurrido en San Salvador el 5 de noviembre de 1811. Ese día el Pbro José Matías Delgado, los hermanos Aguilar y Manuel José Arce tocaron las campanas de la iglesia La Merced en el barrio del mismo nombre, llamando a desconocer al Rey y al Capitán General. Al menos eso fue lo que me enseñaron en la escuela. Este esfuerzo no prosperó y logró concretarse hasta el 15 de septiembre de 1821. Antes de eso hubo otros esfuerzos como el de ... (busco en la Red) diciembre de 1811 en Granada, León y Rivas, en Nicaragua; el del 21 de diciembre de 1813 en el Convento de Belén, en Guatemala; y del 24 de enero de 1814 nuevamente en San Salvador. El evento largamente esperado ha sido celebrado sobre todo en la ciudad capital y se ha extendido a algunas ciudades del interior de la República. Quiero hacer algunos comentarios al respecto.
  • Primero no celebramos el "Bicentenario de nuestro país" Existe alguna confusión al respecto fuera de nuestras fronteras. Algo contribuyó que una cadena de supermercados ha promocionado en sus anuncios el "Bicentenario de El Salvador". Me pareció una campaña irresponsable (o que denota una gran ignorancia). Esta misma cadena patrocinó el espectáculo de fuegos artificiales que se desplegaron anoche en el monumento al Salvador del Mundo.
  • Esta fiesta no es propiamente nacional, si acaso es una fiesta para San Salvador, la ciudad en donde ocurrió el evento. En todo caso tendría que ser una fiesta integrista para todos países que formaban la Capitanía General de Guatemala. No se ha montado de esta manera, sino de una manera nacionalista a nuestro favor.
  • Me gusta que a lo largo de estos meses en las páginas de LPG se le ha dado espacio a la Historia de nuestro país. Ha habido un pequeño esfuerzo para enmarcar el suceso en el período histórico en que ocurrió. Esto es nuevo, pues cuando aprendí en la primaria sobre el "Primer Grito" nunca me pusieron en contexto que a partir de 1808 España estaba sumida en su propia guerra de independencia con el Primer Imperio Francés, lo que le llevó a aflojar su control sobre las colonias americanas y permitió de los movimientos independentistas de 1810 (en Argentina y México para citar un par de ejemplos)
  • Esta celebración no ha sido aprovechada correctamente ni por la Alcaldía de San Salvador ni por el Gobierno salvadoreño. Si bien se han montado numerosos actos para recordar, enseñar y aprender la historia oficial sobre esta fecha, me parece que tendrá poco impacto en la vida nacional dentro de cuatro o seis meses. Claro que habrán más personas que conozcan sobre lo ocurrido este día hace doscientos años y que esta fiesta será reforzada en el ideario nacional ¿Cómo recordaremos este día? ¿Cómo perdurará en la memoria colectiva? ¿Sólo como un espectáculo con artistas salvadoreños enfrente del Palacio Nacional? ¿Como un festejo de fuegos artificiales en el Monumento al Salvador del Mundo? ¿Cómo un refuerzo a esas palabras e ideales tales como Independencia, Libertad, República o Democracia?
  • Está bien que celebremos, pero al mismo tiempo debemos reflexionar ¿Servirá esta celebración para que cambiemos el rumbo de nuestro país? Estar ubicados por Naciones Unidas entre los dos países más violentos del mundo no causa ningún honor. Si es el primero o el segundo lugar ¡Qué más da! Es un puesto que lo hemos ganado con sangre de nuestros compatriotas. Ojalá sirva esta celebración para que todos tomemos conciencia que vamos al precipicio si continuamos de esta manera. ¿Servirá esta celebración para los Órganos Ejecutivo, Legislativo y Judicial trabajen juntos para depurarse y eliminar la corrupción, la violencia y las componendas entre los partidos políticos? No puede seguir siendo sostenible un país en donde se partidiza y se hace proselitismo con la asistencia a las víctimas de las lluvias que anegaron nuestro país durante el mes de octubre pasado.
  • Ya lo dijo Borges sobre los eventos históricos Los días han caído en aniversarios... los hombres que vivieron en próceres, los próceres en calles y en mármoles. Mientras sigamos alabando a los próceres y los veamos únicamente como estatuas de mármol o como tetuntes de concreto, no avanzaremos como país. Debemos seguir su el trabajo que ellos iniciaron. ¿Cómo podemos ser un país independiente si nivelamos nuestra balanza de pagos con las remesas enviadas desde EE.UU por nuestros compatriotas? En otras palabras, nuestra economía depende de esas remesas.
Quizá me he quejado demasiado, es por esto que recomiendo esta breve y sustanciosa nota de Arbolario.

Nota:
Tetunte: palabra salvadoreña que en este contexto significa "enorme pedazo"